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Aves Exóticas

Cernícalo del amur

¿Es posible que hayas oído hablar alguna vez del cernícalo del Amur? Por supuesto, porque a fin de cuentas se trata de una de las especies de halcón más maravillosas y majestuosas que existen en el mundo.

No te la puedes perder

Antiguamente, el falco amurensis, o cernícalo del Amur que es como se la conoce comúnmente, se pensaba que era una subespecie del cernícalo patirrojo. No obstante, los expertos determinaron que era una especie totalmente distinta.

Se reproduce en el sudeste de Siberia y el norte de China, migrando al sur de África cuando llegan los meses de invierno. Es raro de verlo por Europa.

Un aspecto impresionante

Se trata de un ave de tamaño medio que puede llegar a medir 30 cm de largo. El macho se caracteriza por el color castaño pizarroso oscuro de sus plumas, motivo por el que puede ser confundido con un gavilán. No obstante, debido al color castaño bajo su vientre, este error no se puede cometer. Otros lo pueden confundir con el halcón pizarroso y el cernícalo pizarroso, pero las patas de este no son de color cerca amarilla como esas. Las coberteras son de color blanco.

As hembras, por su parte, es más fácil confundirlas con otros ejemplares, porque el patrón de su cabeza es bastante típico. No obstante, dado que tienen la coronilla gris, sería fácil diferenciarlo del cernícalo de patas rojas. Además, tiene barrados en la parte baja del vientre, y las atas de color rojo.

Los jóvenes si que podrían confundirse con la especie de los patirrojos, ya que cuando nacen sus patas son de un color similar. Sin embargo, la coronilla es más oscura y carecen del color anteado hacía arriba en la zona del vientre.

Hace años se consideraba que era una subespecie del cernícalo patirrojo, pero dado que ahora es una especie separada, se cree que podrían tener algún parentesco.

No deja a nadie indiferente

No es una especie que pueda dejar indiferente a nadie que lo vea en libertad. Al igual que el patirrojo, su alimento principal son los insectos como las termitas y algunos de gran tamaño. En alguna ocasión se le puede ver comiendo algún pequeño mamífero o alguna ave en el caso que no encuentre el alimento que desea.

Otro motivo por el que se le asociaba como un miembro de los patirrojos era por su forma de reproducirse. No construyen sus nidos, sino que aprovechan los que dejan otras aves para reproducirse. De media suelen poner unos 3 huevos, pudiendo poner un máximo de 5, pero es un caso muy excepcional. Ambos progenitores colaboran en la tarea de la incubación. Una vez que pasa el mes, nacen los polluelos que los padres dejan en libertad una vez que han cumplido los 2 – 3 meses de edad.

Es un ave rapaz que suele cazar durante el día, y son pocos los casos en los que esta ha atacado a los seres humanos. Suele ser una especie bastante tranquila y que no busca problemas con otras aves. Viven en colonias de 50-60 parejas en zonas muy abiertas. Rara vez se les puede ver por las ciudades.