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Aves Exóticas

Pato de carolina

Si tienes unos buenos terrenos, ¿por qué no tener algunos patos que te alegren el día a día en tu estanque? Así podrías tener algunas crías y aprender a cuidar de otra especie. ¿Cuál sería una buena opción? ¿Qué te parece el pato de carolina?

¿De dónde es esta ave?

El pato de Carolina es más conocido como pato joyuyo, también denominado Aix sponsa, aunque recibe también el nombre de pato de la Florida o pato huyuyu, según el lugar en el que se encuentre.

Principalmente reside en las costas este y oeste de los Estados Unidos, en los que frecuenta los lagos y pantanos. En algunas zonas de Centroamérica también se le puede ver, como Cuba y Puerto Rico. También se intentó su introducción en Europa, pero no logró adaptarse tan bien como el pato mandarín.

¿Y cómo es?

Se podría decir que tiene un tamaño medio, ya que suele medir entre 47 – 54 centímetros de largo, con una envergadura de 66 a 73 centímetros. Su peso suele rondar el kilo y medio, aunque puede ser un poco más pesado.

Presenta un ligero dimorfismo sexual, ya que el macho tiene el plumaje indiscente multicolor, con los ojos de color rojo y un poco de color blanco en la zona del cuello. Por su parte, la hembra es menos colorida, con el anillo ocular de color blanco y la garganta de color blanco. Además, es un poco más pequeña que el macho. Otra seña distintiva para diferenciar el sexo es que el macho, al igual que sucede con el pato mandarín, tiene una cresta. Las crías cuando van creciendo se parecen mucho a la hembra, con la única diferencia que no tienen manchas blancas alrededor de los ojos.

El pico de los machos es de color naranja, con el plumaje de la cabeza de un tono verde metálico con tonos púrpuras, negro y líneas blancas. En el cuello tienen un color anaranjado con manchas de color amarillo.

No suele ser un ave muy problemática para los cuidadores, aunque si que es algo asustadizo. Por ello, cuesta mucho ganarse la confianza de esta especie y es mucho mejor dejarla a su aire por los terrenos. Aunque se vende como especie doméstica no es muy recomendable tenerlo en una casa, salvo que haya algún estanque o río cerca.

¿Qué debes saber para cuidar de esta ave?

Lo cierto es que aunque esta ave viva en tus terrenos, por norma general suele cuidarse por su cuenta. Su alimentación se compone de bayas, bellotas, semillas y de algunos insectos. Lo normal es que se mueva por la superficie de un lago o río para buscar alimento, muy rara vez lo busca bajo el agua. El alimento vegetal compone la mayor parte de su dieta diaria.

Cuando van a reproducirse, no les gusta mucho la intervención humana, prefiriendo ser ellos mismos quienes construyan el nido y elijan cuál va a ser su ubicación. Suele estar cerca de los ríos, con el fin de poder conseguir alimento más fácilmente para la hembra que es la que incuba los huevos. Al nacer los polluelos, suelen estarse unos cuantos días con la madre en el nido, hasta que finalmente llegó el momento de salir al río a nadar por primera y también para aprender a buscar alimentos.

Al ser una especie tan asustadiza, no es muy recomendable que este cerca de animales que sean más activos, como perros o gatos. También hay que tener mucho cuidado con los depredadores, pues este animal ha sido víctima de ataque de animales salvajes que irrumpen en las granjas y terrenos para cazarlo como su alimento.