En España hay muchos tipos de buchones, y es posible que más de uno sea desconocido. Pero en Andalucía, en la provincia de Sevilla, hay uno que convive con los hogareños y que siempre ha sido muy bien recibido: el buchón rafeño.
Un origen bastante antiguo
A pesar de que se podría decir que este buchón lleva casi toda la vida en la provincia sevillana, lo cierto es que su origen es árabe. Fue introducido durante la dominación árabe en España, más o menos por el siglo VIII, y según algunos textos antiguos se dice que se introdujo un palomo, que no buchón, de cara y pico corto. Más tarde se cruzó con lo que era el buchón Gorguero y más tarde con otro buchón de la zona: el colitejo.
No se sabe realmente cuando se consolidó realmente la raza del buchón rafeño, pero la distancia del tiempo hace suponer que tuvo que ser más o menos durante el mismo tiempo que se cruzó con las dos razas. El tiempo ha hecho que este buchón haya sido conocido como “el rey de la seducción”.
¿Y cómo es este buchón?
De temperamento no hay buchón más meloso que este. Insuperable cuando se trata de seducir a una hembra, bravo y noble como un toro. Suele ser bastante apacible, pero también muy receloso cuando se tiene que enfrentar a lo desconocido. A pesar de ser un ave tan ligona, no acosa a la hembra como otras aves de la familia de los buchones, sino que se acerca a ella con tranquilidad.
Es un ave de tamaño medio, cuyas medidas oscilan entre los 22 y 26 cm dependiendo si es hembra o macho. La cabeza es ancha, de ojo a ojo, con una hendidura palpable entre las dos cuencas de los ojos, aunque a simple vista parece ser plana cuando es vista por encima. Las plumas que cubren su cabeza están contraídas hacía esta, con un tacto sedoso a pesar de lo pequeñas que son.
Se podría decir que esta ave es conocido como el rey de la seducción, entre otras cosas, por lo hermosos que son sus ojos. Su color depende de la coloración de la pluma, pero puede ir desde un amarillo pálido a un rojo fuerte. La buena calidad de la raza de esta ave se nota en el ribete del ojo, que debe ser fino, lo que le da signos de nobleza, y situarse tan cerca como sea posible de la boquera.
Una gran peculiaridad de la raza es su pico, corto y grueso, en un grado superlativo. Tiene mucha curvatura en la parte alta de la mandíbula superior, siguiendo la misma línea de altitud que marcan sus carúnculas nasales. La parte inferior del pico también debe curvarse, pero en menor grado. En la parte inferior del pico tiene unas membranas carnosas, similares a las de sus carúnculas nasales. Lo normal es que sean tres, una a cada lado y una en medio de mayor tamaño.
El buche, aunque no es el más grande de la raza, si que tiene una superficie amplia y es redondo, sobrepasando el diámetro del pecho hacía abajo, quedando colgando sin exceso. La cola perfecta de esta raza tiene que ser corta y ancha, en proporción a su albardilla. Del mismo modo, sus alas tienen que ser cortas, no llegando a superar el tamaño de la cola, de pluma ancha con una pluma sobre otra, lo que permite a esta ave lucir hermosa para exposiciones o tener mayor velocidad de vuelo.
Criarlo, ¿supone un reto?
Los criadores más expertos no tendrán muchos problemas a la hora de tratar con esta ave, pero es posible que aquellos que tengan menos conocimientos en la cría de palomos si que tengan algún que otro problema.
Especialmente a la hora de sacarlo a entrenar para volar. Dado que es un animal de carácter receloso, a pesar de que tenga ya bastante confianza con su dueño, no le gustará mucho salir a conocer lo que hay en el exterior. Por este motivo tiene que estar acompañado de un ave con el que ya tenga confianza, y que al mismo tiempo ya esté entrenado para volar por su cuenta. Así se puede asegurar el criador que este no se perderá.
Su carácter ligón puede hacerlo muy adecuado para salir a buscar aves, especialmente a las hembras. Una vez que está entrenado no existe mejor ave en el mundo para encontrar a palomos que se hayan perdido o como compañero de entrenamiento. Y cómo ave de exposición, supone todo un reto tenerlo listo para los concursos que puede ser muy interesante para los criadores que quieran probar cosas nuevas.