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Aves Exóticas

Buchón Gaditano

¿Quién no se ha quedado prendado del buchón gaditano cuando ha visitado la ciudad de Jerez? Y no es para menos, porque su aspecto es bastante llamativo y atractivo. Pero, ¿qué hay que saber de esta especie?

¿Cuándo apareció esta raza?

Los buchones gaditanos, también llamado buchón jerezano o isleño, es normal verlo en la provincia de Cádiz. Su origen parece remontarse a principios del siglo XX, descendiendo de un cruce entre el buchón gorguero, el buchón rafeño, el buchón colitejo (un antepasado del buchón marchenero) y, según algunos expertos, de algún tipo de buchón francés.

Por norma general es un animal que se usa para animal de compañía, de exposición y para los concursos de vuelo. Pero no fue casi hasta la segunda década del siglo XX que apareció el buchón gaditano tal y como se conoce actualmente.

¿Cuáles son las características generales de un buchón gaditano?

Lo normal es que sea un palomo de tamaño medio, la longitud ideal tiene que ser entre 22 y 26 cm, con los machos un poco más grandes que la hembra, con un peso entre los 350 a 450 gr. de peso.  La cabeza tiene una forma alargada, pareciendo una almendra, teniendo que existir distancia entre el ojo y el pico si se quiere usar para competiciones.

Sus ojos tienen un ribete a su alrededor, fino y de un tono gris blanquecino. Lo normal es que el color de sus ojos tenga un tono anaranjado, pero también hay variantes con un color quinda o negro. Su pico es corto y fino, con la parte superior siguiendo una línea elíptica de la cabeza. Según el plumaje, el pico puede ser de blanco marfil a un tono más oscuro. En los machos adultos pueden aparecer unas arrugas en cada lado del pico y otra en la parte central, por debajo de este, aunque no siempre la tienen.

Con un amplio buche, de forma redondeada pareciendo una media esfera, en reposo este puede ser un poco más esférico. El buche rebasa los codillos, lo que le da una silueta esbelta a esta ave. Su cuerpo tiene un pecho ancho, normalmente dos terceras partes de su longitud, con forma de triángulo isóceles.

Las plumas por norma general son medianamente anchas y largas, llegándole hasta el final de la cola sus enormes alas. Su cola es corta y cerrada, teniendo una curiosa forma de cuña de unos 4 cm de ancho y larga. Sus plumas son sedosas al tacto, de un tamaño mediano y bastante abundante.

Es una raza con una amplia diversidad de colores, aunque lo normal es que el color base sea el azul, también las hay con negro o el rojo.

Todo un reto para los cuidadores

En realidad, el buchón gaditano puede ser más sencillo de cuidar de lo que parece. Pero muchos cuidadores inexpertos se quejan de que es un ave que suele padecer de embuchamiento, debido a un problema genético o sufrir algún tipo de infección como cidiosis o tricomoniasis. También es un animal que suele engordar con facilidad, por lo que hay que tener mucho cuidado con la cantidad de comida que se le da al día. Aunque su esperanza de vida es media, es raro que un buchón gaditano muera de viejo.

Para la cría también es una raza difícil de tratar. Debido al tamaño del buche no pueden asentarse bien en el nido, lo que impide por un lado que puedan incubar bien los huevos y por otro dar de comer a los pichones cuando estos son pequeños. Por ello hay que recurrir a una nodriza para que realice este trabajo. En el caso de no tener ninguna nodriza en el palomar, salvo que se acostumbre a los pichones a comer por su cuenta o dándoles de comer directamente con una mezcla especial, hay altas posibilidades de que estos mueran a los pocos días.