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Aves Exóticas

Loro yaco

¿Te estás preguntando cuál podría ser el ave idóneo para ti? Pues quizás deberías pensar en algún tipo de loro, como el loro yaco. Una de las especies de loros más extendida del planeta y que seguro que te hará mucha compañía durante muchos años.

Un ave muy querida

El psittacus erithacus, conocido comúnmente como loro gris de cola roja o yaco, es una de las especies de loro más extendidas en el mundo como mascota. Reside especialmente en África, pero el comercio ha hecho que se haya extendido por el resto del mundo.

Tiene algunas características que lo hacen único, como el que es un animal bastante inteligente y con una gran capacidad para memorizar y repetir palabras, motivo por el que es tan deseado como animal de compañía.

¿Y cómo es físicamente esta ave?

Es un loro de tamaño medio que mide alrededor de 33 cm de largo, aunque algunos ejemplares pueden medir 39 centímetros, y pesa de media unos 500 gramos. Se caracteriza por ser un ave bastante longeva, ya que la media está en 70 – 90 años, pero algunos ejemplares han llegado a alcanzar los 100 años de vida.

Presenta un ligero dimorfismo sexual, ya que las hembras son más pequeñas que los machos, aunque no es algo por lo que muchos se pueda fiar para determinar el sexo. Las hembras suelen tener un plumaje más claro que el de los machos. El macho suele ser más macizo, de cabeza cuadrada y su pico negro más grande que las hembras, además de que el tono gris de su plumaje suele tener un toque más apagado. Cuando son jóvenes suelen parecerse mucho a las hembras, pero con la muda de la piel suelen tomar el color de la pluma de los machos. En el caso de los iris, es muy oscuro cuando son jóvenes, con más edad toma un tono amarillo claro y poco después cambia a aun amarillo intenso.

La cola del yaco destaca por su tono rojizo, rompiendo el esquema de colores que se puede ver por todo su cuerpo, pero en el caso de los ejemplares jóvenes no es de ese color, sino que tiene un tono más negruzco que cambia al alcanzar la madurez.

https://youtu.be/45kEWVnivZ8

Son animales gregarios, pero muy cariñoso y amables. Su relación con los seres humanos no podría ser más óptica, pudiendo ser tan apegado a su dueño como un agapornis o un guacamayo, aunque para muchos eso puede resultar un problema ya que resultan ser bastante melosos.

Se le reconocen tres subespecies, aunque según algunos serían tres:

  • Psittacus erithacus erithacus que sería una especie muy parecida a la nominal pero que solo se diferencia de esta por el tamaño.
  • Psittacus erithacus timneh la cuál tiene la cola de un tono de color vinagre.
  • Psittacus erithacus prínceps que es muy parecida a la nominal, pero esta reside en las islas de S. Tomé y Prínipe.

Entonces, ¿es la mejor mascota del mundo?

Es cierto que en Europa y Estados Unidos el loro yaco se ha convertido en todo un icono del ave mascota, pero hay que tener mucho ojo de escoger a esta mascota. Empecemos por el hecho de que es un ave bastante longeva, que puede vivir más que su dueño, lo que para muchos les echará para atrás.

Lejos de los que muchos creen, no es un ave recomendable para niños pequeños, puedo que su pico es muy fuerte y puede lastimarlos seriamente, además de que cuando se sienten amenazados también atacan con sus garras, lo que podría hacer mucho daño a un niño pequeño. También pueden ser muy violentos con otros animales en el caso de que estos los molesten, por lo que hay que tener mucha prudencia.

Por otro lado, en realidad tener un loro yaco es como tener un niño pequeño en casa, pero durante muchas décadas, ya que demanda atención durante las 24 horas del día al ser un animal tan inteligente y sensible. De no hacerle caso, acaba cayendo rápidamente en una profunda reproducción. Cuando estrechan un lazo con su dueño, captan rápidamente los sentimientos de estos y pueden obligarle a enfrentarse así mismo, porque su comportamiento refleja lo que pasa por dentro. En el caso de no tener una pareja, es a su dueño al que consideran como tal y serán muy melosos.

En lo referente a su alimentación, suele cometerse un error muy común, y es alimentarlo con pipas de girasol. Pero esto no tiene que comerlo, ya que es un alimento con alto contenido en grasa. Es cierto que les encanta y en cuánto la pruebe no querrá comer otra cosa, pero esto le puede producir daños en el hígado. Asi que hay que darle una comida especial para ellos que esté compuesta por frutas y verduras como la piña, la zanahoria, el melocotón, la ensalada, las coles… todo bien lavado y troceado y servido a temperatura ambiente.

La jaula tiene que ser de gran tamaño, de por lo menos 2x1x1 metros para que pueda moverse bien. Además, esta debe estar bien ubicada para evitar que le dé el sol directamente o que haya mucho ruido, algo que lo estresará. Sus barrotes tienen que ser fuertes, para poder resistir su pico cuando los quiera roer (es mejor que en la jaula tenga ramas para poder roerlas con calma).

Se le puede tener suelto por la casa sin muchos problemas, de hecho son muchos los que los crían en libertad, ya que rara vez suele alzar el vuelo para escaparse al haber estrechado un vínculo con su amo (no hace falta cortarle las plumas de las alas para evitar que se escape). Eso sí, tendrá que tener alguna percha sobre la que posarse con papel de periódico para poder limpiar fácilmente sus heces. Pero, en el caso de tenerlo en libertad, tened mucho cuidado porque podría llevarse cualquier cosa a la boca de alimento que sea tóxico para él o roer un cable, así que acostumbradlo a que se mueva por una parte de la casa que no le resulte peligrosa.