¿Tienes intención algún día de visitar las islas Palaos? Porque si es el caso, igual te interesaría conocer algo sobre su fauna. Allí se encuentra una especie que se conoce como el anteojitos de las Palaos. ¿Te hablamos de ella y así no te parecerá desconocida cuando visites las islas?
¿En qué hábitat vive?
En las islas a esta especie también se lo conoce como “gigante de ojos blancos”. Su nombre científico es Megazosterops palauensis, especie de ave paseriforme que forma parte de la familia de los zosteropidae. Es el único miembro del género Megazosterops.
Tal y como indica su nombre, es endémica de las islas Palaos. El hábitat natural de esta especie son las selvas tropicales de zonas bajas. Actualmente se encuentra amenazada por la pérdida de su hábitat.
¿Alguna característica en particular?
Frente a otros anteojitos, es una especie de gran tamaño, ya que puede alcanzar los 14 cm. Su peso puede llegar a los 13 gramos. No presenta dimorfismo sexual que permita diferenciar los sexos.
Su cuerpo tiene un patrón de color algo irregular. Su pico es naranja, con la parte superior del pico en un tono más oscuro, mientras que la inferior tiene un tono naranja más fuerte. Las patas son naranjas, pero un poco más oscuras.
El rostro combina un verde oliva, con un verde azulado, blanco y un poco de amarillo anaranjado en diferentes patrones, según el ejemplar. En el caso del cuerpo, el color verde gana mayor presencia en el pecho y las partes inferiores, aunque sigue combinándose con el color azul y el amarillo.
En el caso de la espalda y las alas, estas tienen mayor presencia de color verde, aunque el marrón es el color predominante en esta zona de su cuerpo. Al contrario que otros anteojitos, este tiene el anillo ocular en color amarillo.
¿Distinto en su comportamiento?
Es una especie con un canto un poco más “bizarro”, con sonidos más fuertes con un trino muy largo y que no resulta tan agradable de escuchar. No parece vivir en grandes grupos, y aunque no se han detectado movimientos por su parte, no parece una especie a la que le guste compartir su territorio con otras especies.
Su alimentación se compone de pequeños insectos como ciempiés, hormigas y algunos voladores que captura al vuelo. También se alimenta de fruta, y de néctar que consigue de las flores de los árboles. Lo más normal es que vivan en solitario con su pareja, aunque no parece que sea monógama como otros familiares.
No hay datos sobre su proceso de cortejo ni sobre el apareamiento. Por los restos encontrados en nidos, puede poner hasta tres huevos, rara vez se han visto cuatro. Debido a la pérdida de su hábitat, esta especie está catalogada como especie en peligro por la Lista Roja de la IUCN.