¿Te vas a ir de viaje y te gustaría conocer la fauna de aves que hay en América? Si vas a visitar sus bosques y zonas altas, igual te puedes encontrar con el tecolote flameado. ¿Quieres saber cómo reconocerlo? ¡Toma nota!
¿Por dónde se extiende?
Esta especie es también conocido como autillo flamulado, y con el nombre científico de otus flammeolus, siendo un ave rapaz que pertenece al género otus. Es endémico de Estados Unidos, Guatemala y México.
Por lo general suele vivir en las tierras altas de su hábitat, prefiriendo las zonas profundas de los bosques. Pero en algunas ocasiones se le puede ver cerca de los bordes del mismo, explorando el territorio.
¿Qué aspecto tiene?
Se trata de un ave rapaz de pequeño tamaño que puede llegar a medir como máximo los 17 cm y pesar unos 100 gramos. La hembra, por norma general, es un poco más grande que el macho.
Tiene dos particularidades que lo hacen fácil de diferenciar del resto de miembros de familia: primero es que su plumaje es casi totalmente gris en la mayor parte del cuerpo, con la presencia de algunas plumas de color blanco. Lo segundo es que sus ojos son de un tono café, muy diferente a lo que suelen ser el color de esta especie.
Cuenta con unos pequeños mechones de plumas que casi no son perceptibles. Cuando son jóvenes, el color gris de las crías es mucho más claro que el de los machos.
¿Cuáles son sus costumbres?
Como buena ave rapaz que es, suele cazar durante las horas de noche. No obstante, se la ha visto saliendo de su nido durante las horas el día porque así le es más fácil conseguir una presa. Suele preferir consumir los pequeños mamíferos, pero su dieta se compone en su mayoría por los insectos, ya que no puede hacer frente a mamíferos más grandes que él.
Es un buen cazador, que se posa en las ramas de los árboles controlando el entorno para poder localizar a su nueva presa mientras escucha todo lo que le rodea. Lo normal es que la cace al vuelo, pero en ocasiones puede derribarla para terminar con ella en el suelo.
La reproducción de esta especie parece darse entre abril-mayo. La hembra una vez fecundada pondrá hasta cuatro huevos, aunque lo normal es que sean menos. El macho puede colaborar mínimamente en la incubación de los huevos, aunque su trabajo, por norma general, es traer comida al nido. Los huevos eclosionarán a los 24 días.
Una vez nacidos los polluelos, estos se quedarán en el nido hasta que hayan cumplido dos semanas de vida. A esa edad ya podrán volar y realizarán pequeños vuelos por la zona, abandonando el nido vigilados por sus padres. No abandonarán el nido definitivamente hasta que hayan cumplido la mayoría de edad: el mes de vida. Alcanzada esa edad, puede que alguno se quede en el nido si considera que el entorno no es seguro o haya algún tipo de depredador cerca.