Aunque algunas especies están bastante extendidas, desgraciadamente su hábitat es tan profundo que cuesta investigarlos. Es el caso del zorzal serrano, del que se tienen pocos datos. Sin embargo, te vamos a contar todo lo que sabemos sobre él.
¿Qué tanto se ha extendido esta especie?
Según la zona, el Turdus plebejus recibe un nombre u otro. Se lo conoce con el nombre de sensotle montañés, mirlo montañero o zorzal plebeyo. Se trata de una especie de ave paseriforme de la familia turdidae.
Su hábitat natural son los bosques húmedos, montanos tropicales, así como los subtropicales. Se lo puede encontrar en Costa Rica, Guatemala, El Salvador, México, Honduras, Panama y Nicaragua.
Tiene un tamaño medio
Esta especie es de un tamaño medio dentro de la raza, midiendo entre 23-25 cm según el ejemplar. Es más, su peso alcanza los 86 gramos. No presenta dimorfismo sexual en su plumaje.
La especie nominal tiene un plumaje en un tono oliva-marrón bastante oscuro, mientras que alguna de sus subespecies puede tener un plumaje totalmente marrón. Se caracteriza porque la zona del pecho es de un tono más claro, llegando a ser casi completamente blanco, y se oscurece según se desciende a las partes inferiores.
Su pico y sus alas son de un tono negro con ligera presencia de gris. Carece de anillo ocular. Se le han distinguido tres subespecies:
- Turdus plebejus plebejus: Subespecie norminal que se encuentra en Costa Rica y el oeste de Panamá.
- Turdus plebejus differens: Se extiende desde el sureste de México hasta Guatemala.
- Turdus plebejus rafaelensis: Es la más extendida, estando presente en Honduras, Nicaragua, El Salvador y el noroeste de Costa Rica.
¿Qué sabemos de su vida en estado salvaje?
Si hablamos de su carácter, podríamos hablar de una especie tranquila. Claro que siempre y cuando no esté en época de reproducción. Como le sucede a otras tantas aves, durante esta etapa del año se puede volver un poco violenta, incluso con los de su propia especie. Generalmente es sedentaria, pero en países como Costa Rica se ha visto que puede desplazarse, sobre todo con la llegada de la estación de lluvia.
La alimentación de esta especie se compone principalmente de semillas y bayas, bayas pequeñas como el pisco. Alguna vez es posible que consuma algunos pequeños insectos, para alimentarse con nutrientes, especialmente gusanos y larvas.
La reproducción de esta especie depende, en gran medida, de la zona en la que se encuentre. En Costa Rica, por ejemplo, la reproducción tiene lugar entre marzo y junio. Las parejas no están preestablecidas, por lo que no es una especie monógama. Tras la copulación, la hembra construirá un nido en forma de copa, o cuenco, compuesto por ramas, musgo y algunas hojas, todo mezclado con su saliva.
Cada puesta, pudiendo ser a veces hasta dos al año, se compone de dos a tres huevos (generalmente dos). La hembra los incubará durante dos o tres semanas, y al nacer los polluelos, ambos padres se harán cargo de ellos por un mes. A partir de ese momento, ya sabrán volar y habrán aprendido a donde conseguir su propio alimento.