Muchas especies han trascendido a lo largo del tiempo, y aunque parece que no sean muy famosos, lo cierto es que se puede echar un vistazo a tu alrededor y ver cuántas aves tan curiosas que hay a tu alrededor, como es el caso del Martín pescador dorsirruto.
Un nombre bastante curioso
Se le conoce con el nombre de Ceyx rufidorsa y es endémico de la península malaya, las islas de la Sonda y Filipinas occidentales, también viviendo en Indonesia, Malasia y Tailandia. Por norma general habita en selvas tropicales de tierras bajas, cerca de lagos y cauces de agua.
Según algunos taxónomos, esta ave sería una subespecie del Ceyx erithaca, pero por el momento es una opinión muy poco distendida y se le sigue considerando como una especie aparte.
¿Y cómo suele ser?
Es un ave de pequeño tamaño que suele medir entre 17 – 19,5 centímetros y pesar entre 16 y 23 gramos aproximadamente. No presenta dimorfismo sexual, por lo que resulta bastante complicado poder diferenciar al macho de la hembra.
Se caracteriza por ser un ave de hermosos colores, empezando por su pico, largo y fuerte con unos peculiares tonos anaranjados que se traslada hasta una cabeza cuya garganta tiene un tono naranja-amarillo claro para sumarse con el tono rojizo de su cabeza y la parte superior de sus alas. El color se va tornando más naranja según va bajando por la espalda hasta llegar a la cola, donde toma una mezcla de rojo con naranja y marrón. Las puntas de las plumas tienen una tonalidad mucho más oscura, parecida al negro.
El motivo por el que se sitúa tan cerca de lagos es porque es un animal cuya alimentación se compone principalmente de peces, lo que supone un 60% de su alimentación, los cuáles caza utilizando su largo pico. Aunque también come otros tipos de animales invertebrados, como gusanos, larvas, caracoles y algunas lagartijas y salamandras.
No suele ser un animal que muestre un comportamiento muy reacio hacía los seres humanos, ni tampoco hacía otros tipos de aves, aunque lo más común es verla con el resto de miembros de su misma especie o alguna similar.
¿Se puede tener como mascota?
Lo cierto es que, aunque no sea la mascota ideal, si que puede hacer bastante compañía tenerla en casa. Se puede acostumbrar a la vida en cautividad, aunque lo cierto es que esto puede acortarla bastante.
Para empezar, aunque sea un animal de pequeño tamaño, precisa de una jaula bastante grande para poder volar libremente por ella, ya que durante el día es un ave que le gusta muy poco estarse quieta. Le encanta revolotear de un lado a otro, aunque esté dentro de cuadro paredes. Dentro de la jaula precisará de muchas ramas y troncos.
Dado que su alimentación se compone de peces pequeños, habrá que suministrárselos en el comedero o dentro de la jaula, lo que supondrá tener que limpiarla al menos tres veces a la semana para evitar la contaminación de la misma por los restos que puedan quedar en el suelo, al igual que cuando se alimente de animales invertebrados, de los que dejará los restos por el suelo.
Su reproducción suele darse en agujeros de riberas arenosas pronunciadas, pero se pueden construir algunos nidos de madera para que repose la hembra tras el apareamiento. Aunque, lo más recomendable, es que el nido esté fabricado con espinas de pescado. Suelen poner de 5 a 10 huevos en mayo, que son incubados por ambos padres hasta que a los 22 días, más o menos, nacen los polluelos que se quedan con los padres hasta cumplir poco más de un mes.
Es un ave que va a requerir de mucha paciencia para su cría, ya que no es nada fácil diferenciar al macho de la hembra, ni tampoco que se acaban aparejando.