Cuesta mucho no enamorarse de los preciosos suirirís, ¿verdad? Son una buena alternativa a los patos. ¿Quieres conocer a alguno más? Porque si es así, hoy te presentamos al suirirí yaguaza.
¿Por qué no se le conoce con ese nombre?
Lo cierto es que esta especie es más conocido con el nombre de yaguasa de pico negro, y con el nombre científico de dendrocygna arborea, una especie de ave anseriforme de la familia anatidae.
Suele vivir en islas caribeñas, como Cuba, las islas Caimán, República Dominicana, Puerto Rico, Jamaica o las Bahamas. Suele buscar lugares con mucha vegetación y grandes fuentes de agua para establecer su hogar.
¿Qué aspecto tiene?
Aunque su aspecto es muy diferente, algunos lo confunden erróneamente con el suirirí bicolor. Mide entre 48-58 cm, pesando el macho entre 760-1240 gramos, mientras que la hembra es un poco más grande, pesando entre 800-1320 gramos.
Al igual que el yaguasa errante tiene una franja que nace en la base del pico y le atraviesa la cara hasta la nuca, pero la zona de la cara es un poco más clara. Desde la base del cuello comienzan a nacerle una serie de plumas negras y marrones que le dan un aspecto moteado. Pero su gran atractivo se encuentra en las plumas alares primarias y de la parte inferior de su cuerpo, en las que las plumas son blancas con bordes negros y le dan un precioso aspecto.
Las plumas del resto de sus alas son de un tono marrón con la presencia de algunas plumas oscuras. Su pico es negro, mientras que sus patas tienen una tonalidad un poco más clara.
¿Buscando más información?
Se trata de un ave bastante sociable. Una vez que ha formado pareja, vive con esa pareja hasta el día de su muerte, siendo monógama. En el caso de vivir con otros ejemplares, las bandadas no suelen ser muy grandes, aunque puede ser que forme parte de un grupo un poco más grande. Incluso puede que este con aves de otras especies en el mismo territorio, con las que compartirá el alimento.
Su alimentación es prácticamente vegetariana, consumiendo muchas plantas vegetales que complementa con algunas frutas y semillas. La hembra, cuando llega la época de celo, consumirá algunos insectos y pequeños anfibios acuáticos para obtener los nutrientes suficientes para sus crías. Cuando son pequeños, los insectos son la principal fuente de alimento de los polluelos.
La época de apareamiento de esta especie variará según la zona en la que se encuentre. En algunos casos puede que sea con la época de lluvias, mientras que otros pueden esperarse al invierno y migrar a zonas más cálidas de las islas para reproducirse. La hembra construye un nido con abundante vegetación cerca del agua, en la que pone hasta 10 huevos. La terea de incubación corre a cargo de ambos padres, que se alternarán a diario durante los 28 días que dura el proceso. Los polluelos dependerán de los padres en todo momento.
La especie se encuentra en situación de vulnerabilidad según el CITES, debido a la destrucción de su hábitat por la construcción de complejos turísticos, así como de la caza de esta especie, pues su carne es una de las más ricas que hay.