
¿Qué la zona del Tibet no tiene una fauna de aves interesante? ¡Eso es porque no conoces la ganga tibetana! Poder verla es todo un lujo, así que más te vale aprender a reconocerla por su algún día te encuentras con ella.
La podrás ver en…
Se la conoce con el nombre Syrrhaptes tibetanus, y es un ave pterocliforme de la familia de los pteroclididae, endémica del Tibet y Afganistán.
Anida y cría en la meseta árida y pedregosa del Tibet, así como en lagunas partes de Asia Central. Generalmente anida en el suelo, buscando el suelo más árido de la zona, pero en la que haya agua para alimentar a sus crías.
Su aspecto es fácil de reconocer
No es nada complicado identificar esta especie. De tamaño y forma recuerda un poco a una paloma. Mide entre 30-41 cm, y presenta un ligero dimorfismo sexual, por lo que se puede diferenciar a los sexos.
Su cabeza es de un tono anaranjado claro, mientras que la nuca y las alas son de un tono castaño muy clarito. En la zona de la espalda tiene unas motas de color negro. Las partes inferiores de su cuerpo son de color blanco, pero su pecho mezcla el blanco con un moteado de color negro. Las puntas de las alas son de un tono anaranjado, mientras que las plumas de su cola tienen un color negruzco. Las plumas de la cola son muy largas. En su rostro tiene una zona blanquecina alrededor del ojo.
La hembra es muy parecida al macho, salvo porque el moteado de su pecho se extiende hasta las partes inferiores de su cuerpo. Además, la espalda es de un tono castaño más oscuro, y puede prescindir del moteado de color negro que si que tiene el macho.
¿Qué vida lleva en libertad?
Es un ave bastante sedentaria. Por norma general viven en pequeños grupos, de 50 a 150 miembros. Aunque viven en comunidad, cada miembro del grupo puede ir por su cuenta a la búsqueda de alimento. Su fuente principal de alimento son las semillas, seguido por brotes de plantas y hojas verdes. Es posible que se acerquen a un campo de cultivo para conseguir su alimento. Cuando hay falta de estos, se pueden alimentar de escarabajos.
El nido es construido cerca de una depresión. La hembra pone de dos a tres huevos, habiendo una diferencia de uno o dos días entre cada huevo. La tarea de incubar los huevos estará a cargo de ambos progenitores. Aunque la hembra será la que se haga cargo de la mayor parte del trabajo.
Pasados unos 20 días, nacen todos los polluelos. Estos ya abandonan el nido nada más nacer, por lo que los padres tienen que vigilarlos para que no se hagan daño o puedan ser atacados por un depredador. El padre da de beber a las crías remojando su cuerpo en un lago o estanque, mientras que la hembra es la que les da de comer. A las dos semanas, los polluelos ya saben conseguir su propio alimento, pero no comienzan a volar hasta tener un mes y medio de vida.