Hoy te vamos a hablar de la tucaneta de la Guayana, una especie de tucán que en algunos países de América es muy conocido y apreciado como ave mascota.
¿Dónde vive esta especie?
Recibe el nombre de selenidera culik, y se trata de una especie de tucán que vive en algunos países de Sudamérica, presenta en las selvas de las Guayanas, motivo de su nombre, en Venezuela y parte de Brasil.
Vive por debajo de los 900 metros de altitud, en la tierra firme de los bosques húmedos y bosques de galería, siempre sobre las copas de los árboles.
¿Qué te parece si aprendes a distinguirlo?
Esta especie es un ejemplar de tucán de tamaño medio, normalmente entre 30-35 cm de longitud. En algunos casos la hembra puede ser un poco más grande que el macho. Presenta un ligero dimorfismo sexual, puesto que el macho tiene la corona, la nuca, el cuello, la garganta y el pecho de color negro, mientras que la hembra es gris, salvo en la zona de la nuca que es más rojiza.
El color de su pico es rojo, con la punta de color negro. En ambos sexos el dorso, vientre, alas y cola son de color verde, con las puntas de la cola de un tono rojiza. Cuenta con una región infracaudal de color rojo. La línea auricular es amarilla y la piel alrededor del ojo de un tono azul turquesa celeste.
Difícil de ver en libertad
Aunque se encuentra una especie de sobras extendida, es muy difícil de ver en libertad. El motivo es porque le gusta vivir en las partes interiores de los bosques, sobre las ramas de los árboles, y esconderse en las cavidades de estas para estar a salvo.
No obstante, en Venezuela es muy apreciado dentro del mundo de la avicultura como ave de compañía o mascota. Esto ha hecho que se extienda a otras regiones como un ave que se pueda tener en una jaula. No obstante, está acostumbrado a alimentarse de unos determinados frutos, como los oenocarpus vacaba o cecropia, lo que hace que sea difícil mantenerlo en regiones lejos de Sudamérica. En algunas ocasiones también se alimenta de insectos y de otros artrópodos, algo que puede resultar muy caro. Sin embargo, establece un fuerte vínculo con su criador y es un ave bastante cariñosa.
Cuando vive en libertad, sin embargo, se trata de un ave mucho más solitaria. Le gusta vivir en calma en su cavidad o posarse sobre las ramas de los árboles antes de ir a buscar la comida para comprobar el entorno, ya que es desconfiada. Muy rara vez se mueve con otras aves para ir a buscar la comida.
Solo en el momento de la reproducción es cuando se junta con otros miembros de su especie. Tras el apareamiento será la hembra quien se haga cargo exclusivamente de la incubación de los huevos y de la cría de los polluelos.